Dos cazadores

En el reverso del mismo soporte se encontraba otro estudio preparatorio para el cartón de La merienda. Llama la atención que en el mismo papel estén los dibujos de dos cartones que fueron entregados a la manufactura de Santa Bárbara con un año de diferencia.

Aparecen los dos cazadores, ánade en mano, que vemos en segundo plano en el cartón del pescador. Sambricio destaca el realismo y la expresividad de los rostros, más acentuada que en la pintura. El dibujo se distinguía del resto de los estudios de esta serie de cartones por el marcado contraste de luces y sombras, que modelan, junto con los toques de clarión, las figuras.

Se advierten algunos añadidos en la pintura definitiva como el morral y el pañuelo, típicos de los cazadores, en la figura de la derecha, y también algunas desapariciones como la ausencia de patillas en la de la izquierda. Las diferencias en los detalles que se aprecian entre el dibujo y el cartón confirman el sometimiento de Goya a las exigencias de su cuñado Francisco Bayeu, ya que no son cambios de estilo sino que parecen impuestos por el criterio de su cuñado.